Tuve la oportunidad de entrevistar a Simeon Coxe de los Silver Apples en vísperas de su visita a la CDMX para presentarse en el Nrmal del 2014. Un gran honor poder enviarle unas cuantas preguntas a este visionario musical y recibir las respuestas desde su email. Siempre altera la percepción de uno conocer la raíz, el origen de cosas, de la música que en esos momentos influye a uno, en este caso la música que escuchaba en los 90’s (Broadcast, Spacemen 3, Stereolab y Portishead). Fue Rafa Saavedra quien primero me comentó de los “Silver Epels” (como él los pronunciaba) y también fue mediante su programa de radio (Selector de Frecuencias) donde por primera vez los escuché.
El debút homónimo de Silver Apples, y su segundo disco, Contact, me dejaron sorprendido, paralizado al escuchar esos sonidos inventados por Coxe acompañados por la arrasadora percusión de Danny Taylor (fallecido en el 2005) y dejar que ese soundtrack se convirtiera en el papel envolvente de futuros sueños.
Formaste parte de la escena underground de Nueva York en los años 60. Existía un montón de creatividad por doquier en esos años. ¿Cómo te influyó y a otros artistas de tu alrededor?, ¿cuál dirías que fue el mayor catalizador de esa época para tu propia creatividad?
Mirando tiempo atrás, fue un torbellino de actividad creativa: todos estaban interesados en lo que estaban haciendo los demás y se estaba produciendo mucho intercambio de ideas detrás del escenario y después de los espectáculos. No nos influenció ningún otro músico en particular, sino más bien la atmósfera general artística de estar viviendo “¡algo nuevo!”.
Incluso siendo parte del movimiento musical contra cultural de los 60, Silver Apples sonaba lejos de todos los demás, era música imaginada desde el espacio exterior. ¿Fue este concepto de sonido realmente planeado o fue solo una coincidencia de circunstancias?
Nunca pensamos en nosotros mismos como sonando desde el espacio exterior. Pensé que los sonidos que hacían mis osciladores eran bastante hermosos y no podía entender por qué la gente pensaba que éramos tan extraños.
¿Cuál fue la reacción típica a ustedes en los años 60?. Recuerdo haber leído que bandas como Suicide, a principios de los 70, se la vieron difícil siendo aceptados dentro del contexto del rock, con audiencias tornándose violentas hacia ellos.
Nunca tuvimos reacciones violentas, pero ciertamente tuvimos reacciones atónitas, con la boca abierta, mirando con incredulidad, generalmente durante los primeros 10 minutos del set. Luego, probablemente debido a la hermosa batería de Danny, comenzaron a entenderlo. Por lo general, las chicas primero, comenzando a bailar, y los chicos las seguirían, y después la fiesta.
Silver Apples influyeron musicalmente a generaciones posteriores. Debe ser bonito ser reconocido por músicos afines como Geoff Barrow de Portishead, por ejemplo.
¡Amo la música de Portishead! Para ellos, decir que parte de eso viene de mí es un verdadero honor.
También has colaborado con Roedelius. Tener experiencias como esa, ¿te inspira aún a ir lejos musicalmente?
¡Por supuesto! Me encanta sentarme con otros músicos porque siempre salgo de la experiencia como mejor músico. Recientemente, en un festival en Texas, me senté con Acid Mothers Temple, ¡y casi volamos la carpa!
Con la tecnología actual, has podido “samplear” al gran Danny Taylor. ¿Cómo abrazas / exploras esta nueva fase de tu música?
Realmente no ha cambiado tanto el aspecto en vivo de Silver Apples. Con las partes de batería de Danny sampleadas, secuenciadas o en pistas de acompañamiento, sigo interpretando mis osciladores y voces a sus ritmos, igual que en el pasado. En cuanto a la creación de nuevo material, tengo grabaciones de él practicando en el estudio, donde puedo sacar de él material nuevo.
Es como si todavía estuviera aquí.
La música electrónica hoy está más presente, incluso en el pop más simple. Estas formas de música electrónica, ¿alguna vez pensaste que verías a la música electrónica crecer tanto?
Siempre ha habido una parte de mí que decía “Esto va a crecer a pasos agigantados, porque cuando la gente deje de pensar que es extraño, verán lo emocionante y hermoso que puede ser”. Entonces, para decirte la verdad, no me sorprende.
Los escritores de música, tus compañeros artistas y los fans te ven como una leyenda viviente. ¿Qué es el otro aspecto de ti mismo por el que te gustaría ser recordado aparte de tu increíble música?
Que también soy un pintor medio decente.
Simeon Coxe falleció el 8 de septiembre del 2020, a sus 82 años.
¡Descansa en paz, manzana plateada!
Esta entrevista apareció originalmente en la web del Festival Nrmal, en febrero del 2014.